¿Cómo funciona un disco duro en 2022?

Para entender como funciona un disco duro y cual es su mecánica de funcionamiento, veamos la siguiente descripción: imagina varios platos de metal sujetos por un eje central. Entre cada plato, leyendo cada cara (cara superior = cara 0 y cara inferior = cara 1), existe un brazo con una bobina en su extremo que emite pulsos magnéticos.

Los platos giran a 5600, 7200 o 10000 revoluciones por minuto, en el sentido contrario a las manecillas del reloj. Las cabezas de lectura o sea las bobinas en los extremos de los brazos, emiten pulsos eléctricos moviéndose desde el borde hacia el centro y viceversa..

Un disco duro realiza sus funciones escribiendo datos mediante pulsos magnéticos en platos que giran a 7200 ó 10000 rpm.
Un disco duro realiza sus funciones escribiendo datos mediante pulsos magnéticos en platos que giran a 7200 ó 10000 rpm.

El movimiento genera circunferencias con datos, llamadas pistas o tracks (cada pista a su vez se considera como un conjunto de segmentos llamados sectores o clusters). Cada cara de un plato tiene una pista 0,1,2,3 ….. n pistas. Cada pista está geométricamente encima de su homóloga, en la cara opuesta de cada plato. Si nos ubicamos encima de una pista, geométricamente lo estamos haciendo sobre todas las pistas que tienen el mismo número a través de todas las caras y platos.

Esa forma de ver las pistas se llama cilindro. Por tanto un cilindro es el conjunto de pistas con la misma ubicación pero en una cara distinta (Ejemplo: cilindro 3 = pista 3 de la cara 0 + pista 3 de la cara 1 + pista 3 de la cara 2, etc.).

Normalmente un archivo se almacena diseminado en pistas, sectores y cilindros o sea se graba en las caras de los distintos platos simultáneamente, porque la estructura que sostiene los brazos con sus cabezas de lecto- escritura mueve todo el conjunto de cabezas al mismo tiempo.

El trabajo del disco empieza cuando el programa de aplicación en coordinación con el Sistema operativo comienza a escribir sobre las superficies de los platos. Por cada grupo de datos escrito se crea una nueva entrada de registro en un sector (para ser mas exactos en la cara 0, pista 0, sector 1, en el borde del disco), creando un índice maestro de ubicación de los datos, que se conoce con el nombre de FAT = File Allocation Table (registro similar al índice de un libro). La información de lectura escritura es dada a conocer a la CPU por la tarjeta electrónica propia del disco duro.

Mientras el disco funcione, conservará esta dinámica, a no ser que le ocurra uno de estos accidentes: que un virus borre la Fat, que un operador lo formatee por error, que la sustancia magnética de los platos falle por degradación, o que un día las cabezas de lecto-escritura aterricen sobre la superficie de los platos haciendo perder toda la información escrita.

Estructura Lógica del disco duro.

Un disco duro es un dispositivo que utiliza como medio de grabación el magnetismo. Acorde con eso, las superficies de los platos están cubiertos por una sustancia magnetizable (básicamente óxido de hierro). Los cabezales irradian con pulsos estas superficies para grabar mientras los platos giran a altas velocidades.

El índice de ubicación de los datos se denomina FAT (File Allocation Table) y es el equivalente al índice del contenido de un libro. Previendo que un accidente (error de escritura, ataque de virus, borrado accidental del operador) puede dañar la FAT, se establece (bajo control del Sistema Operativo) la existencia de una segunda FAT de respaldo. Esta no es visible a simple vista sino con herramientas de Software especiales que se utilizan para recuperar datos perdidos.

Como norma general, los datos no se escriben en las pistas en forma secuencial (imaginemos el tiempo que se requeriría si cada vez que se deseara escribir un dato nuevo pero relacionado con un anterior, tuviéramos que esperar a que un plato diera la vuelta para que los dos datos quedaran juntos). Esto se puede ver con programas especiales (Defrag de Windows, por ejemplo) que muestran la superficie del disco en forma de mapa con ‘baches’ de espacio.

Esta forma de trabajo si bien acelera la operación de escritura, produce en contraposición la demora en su operación contraria: la lectura de datos. Dado que las porciones de un archivo quedan dispersos, la lectura es un trabajo extraordinario para un disco duro considerando que su velocidad de rotación está alrededor de los 5600, 7200 o 10000 revoluciones por segundo.

Aparte de la conexión física y el bus utilizado por el disco duro, en la transferencia de datos, existe un factor no menos importante: la forma en que se graban y leen los datos internamente, esto es, si se trabaja con sistemas de archivos FAT 16, FAT 32 o NTFS (que se establecen cuando se formatea el disco).

La superficie del disco se prepara con el Sistema Operativo en sendas operaciones conocidas como PARTICIÓN, FORMATO E INSTALACIÓN de cuyos detalles nos ocuparemos en los próximos capítulos.

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